Translate

28 may 2019

EL PIMENDÓN Periódico de Robres Nº 161 Enero-Marzo 2019


EL PIMENDÓN  Periódico de Robres 
 Nº 161  Enero-Marzo 2019


FIESTAS DE SAN BLAS 2019

San Blas, nuestra fiesta patronal mayor


Comidas de encuentro y convivencia
El calendario santoral fija la festividad de nuestro patrón San Blas el día 3 de febrero, por lo que nuestras fiestas mayores son las de invierno. Como este año la climatología acompañó poco , la carpa instalada en el frontón se erigió en local permanente de los actos públicos, como  bailes, conciertos y comidas. La ermita de San Blas y la Iglesia acogieron los actos religiosos.
Como   muy bien refleja Luis Manuel en su  reportaje de la mañana de San Blas, la misa en la ermita con el beso a la reliquia y el reparto de magdalenas bendecidas, así como las migas en el patio de Manolo Gardeta constituyen el arranque más genuino y tradicional de nuestra fiesta.
El otro día central de la misma es el día, la fiesta de Sta Águeda, que ha pasado a ser el día reivindicativo del protagonismo social de la mujer al amparo de la Santa, ya que el 8 de Marzo se ha constituido en el día de la reivindicación laica de los derechos de la mujer en todo el mundo.
Los actos programados en el distintos días nos congregaron a todos en los bailes con las orquestas La Faina, Séptima Avenida, Nueva Saturno y el Concierto de Olga y los Ministriles en el a tarde del día 3.
El derby futbolístico con el A.D. Almudévar, los talleres para niños, la cena popular y la comida de Sta Águeda ofrecieron entretenimiento y disfrute para todos los vecinos y visitantes que se acercaron a Robres, especialmente en el fin de semana.





Baile y conciertos



Talleres para los niño/as







Animación de calle

































UN AÑO MÁS, UNA MAÑANA MÁS…


Luis Manuel
Beso de la reliquia de S. Blas y reparto de magdalenas bendecidas
Llegados a cierta edad, a esa edad en que los días caminan lentos y los años rápidos, a esa edad que vuelven a tu mente casi a diario recuerdos, vivencias, emociones, tradiciones… A esa edad que valoras sobremanera el encuentro y la amistad por encima de tantas y tantas cosas que el tiempo se encarga de arrinconar sin piedad alguna… Pues eso, la mañana de San Blas en Robres es encuentro, es amistad, es tradición… es el sentir compartido de un pueblo que celebra la fiesta del patrón con orgullo en torno a esa misa a las nueve de la mañana en la recoleta ermita del Parque, con esas reliquias ancestrales del Santo, que cada cual venera según le dicta su corazón, con esas magdalenas que se bendicen a los pies del que fuera Obispo de Armenia, con esa apreciada foto de familia, con ese encuentro con algunos robresinos que no olvidan ese tres de febrero y se acercan puntuales cada año a la cita matutina y con esas tradicionales migas en casa de Manolo Gardeta que hacen que se prolongue el encuentro hasta bien entrada la mañana en un ambiente de recuerdos, de vivencias y de emociones. No faltan los chascarrillos y las anécdotas en torno a la celebración y no faltan esos convecinos veteranos que en su día fueron protagonistas de esa mañana de San Blas en nuestro pueblo: Pedro, Esteban, Mariano, Manolo, Antonio, Lorenzo, Rafa… Su presencia le da a la mañana ese toque festivo-familiar que aglutina en torno a ellos tantos y tantos años de experiencias nacidas de las raíces más profundas de nuestro pueblo y que no dudan en compartir para goce y disfrute de los más jóvenes.  Pedro se arrancó con estas dos  joticas que improvisó y cantó a capela Pedro
No sé cómo dios me ha dau
tanta fuerza pa el descanso
tanta gana de comer
Migas en Casa Manolito
y tanto amor al morapio

Me gusta beber vino
entre amigos y en barral
bailar con zagalas guapas
y juntos jotas cantar


Un año más, una mañana más en la que se echa en falta ese relevo generacional que, en mi opinión, no acaba de llegar con el entusiasmo que sería deseable para que nuestras tradiciones sigan vivas  por los años y los años…





****************************


Más de  700 corredores en el  V Trail de Robres

Ana Revilla y Javier Bielsa fueron los ganadores.


El domingo   20 de Enero se celebró enRobres el V Monegros Trail Barri reuniendo a un total  de 705 corredores. La prueba daba a elegir entre dos  opciones de recorrido: uno de 10 kilómetros, que se dirigía a los recién iniciados en esta disciplina, y otro de 16, especialmente pensado para los más experimentados.











 Ambiente colorido y animado




 















 Jorge Salas Ausens ganador del circuito corto





 Trio de robresinos en meta

El circuito fue atravesado emblemáticos puntos de la sierra, como el barranco Zaragoza, el camino viejo, la senda Puntaza o la subida a Puy Ladrón.


Esta prueba, la segunda puntuable del circuito Monegrostrail, estuvo organizada por el Ayuntamiento de Robres, la Comarca de Los Monegros y el club Monegrosman Triatlón.

Los primeros en cruzar la meta fueron, evidentemente,  los participantes del recorrido corto. En categoría masculina, el ganador ha sido Jorge Salas (Zona Sport-Frutas Villapepita), montisonenese con ascendencia robresina; Yazar Perales (segundo) y Eduardo Suárez (tercero) quienes subieron al pódium. En féminas, la vencedora  de este recorrido corto fue la corredora local Sandra Cuello, seguida de  Noelia Marqués (segunda) y Gisela Miralles (tercera).

En el trail largo, de 16 kilómetros, los ganadores del premio de montaña fueron Toño Muro y Ana Revilla. La corredora zaragozana logró mantener esta primera posición hasta el final, consiguiendo una nueva victoria en Robres, por delante de Cuca Penades (Cuarte de Huerva) y de Raquel Villamón (Azuara Corre).

En categoría masculina, la clasificación dió un vuelco en la recta final, pues  Javier Bielsa (Kilómetro 0 Caspe) protagonizó una gran remontada en los últimos kilómetros hasta hacerse con la victoria. A tan solo unos segundos, entró Toño Muro (CCR Trail) y después, Antonio Lasobras (Cinco Villas).
 En la clasificación por equipos fue  el Club Atletismo Cuarte de Huerva quien consiguió  la victoria en categoría femenina y el Club Cinco Villas, en la masculina.

En categoría local, el mejor  corredor fue ha sido Anselmo Conte y entre los comarcales, David Ezquerra (Sariñena) y Tere Gutiérrez (Leciñena).

El campo de futbol San Blas y su entorno presentaba un aspecto espectacular ya en los momentos previos a la carrera con una climatología muy agradable y la afluencia de participantes, acompañantes y espectadores que aseguraba unas condiciones óptimas para l@s corredo@s y el público.

 Anselmo Conte y su hijo, dos generaciones en la carrera
La Asociación de Mujeres y el Grupo de Quint@s brindaron una inestimable y eficaz colaboración a los organizadores facilitando así la atención y servicio de intendencia a l@s participantes.
Destacar y  aplaudir finalmente la numerosa y destacada participación de robresin@s en este Traid de lo que dejamos testimonio gráfico en la foto de Grupo tras la carrera.












Grupo de atletas robresinos




************************

REFLEXIONES


Ruinas, cambios, porvenir…
Carlos Bolea

 
Pajares derruidos, eras abandonadas, corrales sin tejados de los que sólo quedan restos de paredes de piedras de yeso, yermos plagados de sosas y sisallos, antiguos caminos intransitables, almacenes vacíos, en desuso, remolques aparcados definitivamente por pequeños, herrumbrosos arados anclados entre espigadilla…, todo cuanto miro que miré de niño son ruinas, despojos de lo que un día florecía y tenía vida. Mi mirada infantil todo lo agigantaba. Tan grande todo entonces, carros, tractores, cosechadoras, corrales y parideras, tan pequeños e inservibles ahora. Muchos críos antes, bullicio y carreras por las calles, las escuelas llenas, gente yendo y viniendo, pobreza y escaseces pero animación y vida. Casas vacías ahora, más coches que personas, pocos críos, población envejecida, desiertas calles a cualquier hora, pocas tiendas, poca pobreza pero más soledad y vacío.
  En no tantos años la modernización de la maquinaria agrícola y la manera de desarrollar las labores en el campo así como las explotaciones ganaderas, especialmente las porcinas, ha supuesto un cambio espectacular. Los que aún viven que labraban con machos y yeguas, dallaban el alfalce, apilaban las pacas a mano, limpiaban las acequias a jada, sacaban el fiemo de las cuadras a horca… no creo que quisieran regresar a trabajar tan duramente como entonces, aunque, por edad, ya no podrían. Pero quizá algunos, no sólo los mayores, tampoco vean tan claro adónde nos va a llevar esta forma actual de cultivar. Purín a manta, sulfatos a todas horas, no dejar casi nada en barbecho. Si todavía hay alguien que piense, muchos urbanitas desconocen casi todo de la vida rural, que en los pueblos siempre se respira paz, tranquilidad y sosiego, que se acerque a uno cuando dan lluvia y hay hierbas que matar en las cebadas y trigos, verá las prisas y el trajín de tractores con sulfatadoras por todo el monte. Da la impresión a veces de que hay que trabajar la tierra, criar cerdos, terneros, pollos y corderos como si estuviéramos haciendo acopio por si esto estallara algún día. Unas cosas llevan a otras. Se invierte en grandes tractores, cosechadoras, sembradoras etc. y hay que amortizarlo como sea. Cuanta más tierra mejor, más de una granja para que sean rentables, muchos terneros, muchas ovejas, quien quede porque la mayoría, ya mayores, se las van quitando, y así en una espiral de más y más que no da tregua. Sí, el estrés también se ha instalado en los pueblos.
  Si dejamos la escala local y echamos la vista a la global, que todo está interconectado, el panorama que se vislumbra no es nada tranquilizador. Todo son vaivenes, decisiones de los poderes económicos y políticos con visión miope e interesada, todo para el corto plazo, siempre buscando el beneficio del partido, Comunidad, país o grupo social correspondiente, nada de velar por conservar el medio ambiente y mantener este planeta aún vivo para nuevas generaciones o de tratar de paliar con medidas sociales a los más desfavorecidos. Cuesta mantener cierta esperanza cuando comprobamos que lo mejor que sabemos practicar es el egoísmo y el enfrentamiento entre los humanos. Por otro lado, también sabemos que la ciencia no se estará quieta. La IA (inteligencia artificial) nos deparará continuas sorpresas y novedades, la biotecnología nos permitirá hacernos más viejos, la robótica desempeñará trabajos insospechados, los algoritmos decidirán sin margen de error lo que a las personas da tantos quebraderos de cabeza y, piensan algunos, hasta colonizaremos otros planetas porque éste estará hecho unos zorros.
  Siguen totalmente vigentes, más aún que entonces, las agudas reflexiones del poeta portugués Fernando Pessoa, en la primera mitad del s.XX, cuando en su sugestivo El libro del desasosiego decía que lo que le faltaba a su tiempo era quietud, sosiego y serenidad. Nos dominan las prisas, la aceleración en todo. ¿Qué buscamos?, ¿Qué queremos? No es fácil hallar sentido al rumbo de nuestro tiempo ni a muchas de nuestras iniciativas y decisiones. Y aun así hemos de tratar de encontrar nuestro lugar en el mundo, individual y colectivamente. No debemos cerrar los ojos ante tantos desmanes y arbitrariedades pero tampoco acertaríamos si nos limitáramos a lamentarnos y a despotricar contra todo. Se necesita lucidez,  reflexión y miras amplias. En lo social los cantos de sirena sobre soluciones contundentes suenan a desgraciadas historias del pasado, no acabamos de aprender sus enseñanzas, y en lo individual, ya en la edad madura, no olvidemos que el tiempo es implacable: el ayer no vuelve pero tampoco desaparece, sigue con nosotros y desde un presente que de él viene nos irá también determinando el mañana. Quedarnos ensimismados en la nostalgia y el recuerdo no nos va a devolver nada de lo perdido pero hacer tabla rasa, o pensar que se puede hacer, de lo de entonces, lo vivido y sus circunstancias, tampoco nos permitirá forjarnos un futuro desligado totalmente de lo que hemos venido siendo.



No hay comentarios: